A la hora de hacer negocios, la diferencia entre ser emprendedores exitosos o no serlo radica en muchos puntos importantes que vale la pena mencionar, desde actitudes y hábitos de la vida cotidiana, hasta nuestro modelo de negocios.
Si queremos ser emprendedores que logren salir adelante debemos de pensar en un producto o servicio nuevo que cubra las necesidades básicas de alguna población o segmento de la población de una región. Para esto deberemos hacer un estudio de mercado en el mejor de los casos, aunque también es posible que nosotros estemos tan involucrados en algún sector que ya sepamos las necesidades que se tienen en un momento dado.
Una de las virtudes de cualquier emprendedor es la paciencia, si te desesperas demasiado, lamentablemente no llegarás a ningún lugar, se requiere paciencia para ver como nuestro proyecto despega, además de ver como lentamente retorna nuestra inversión.
Por otro lado la disciplina es fundamental para poder lograr nuestros objetivos a largo plazo, si eres una persona que no es disciplinada, no sabes organizar tus tiempos, entonces tendrás que cambiar esa actitud lo antes posible, ya que de otra manera te será imposible seguir en el juego.
Y por último lo más importante es decidirse a saltar a la acción, nunca lograras emprender nada si te quedas de brazos cruzados haciendo lo mismo que has venido haciendo desde siempre, esta es la peor idea que puedes tener, debes comenzar a moverte, de lo contrario siempre tendrás los mismos problemas, las mismas ganas y nada de resultados.